sábado, 3 de septiembre de 2011

CuentO


La rutina
Había una vez en la ciudad de México una familia muy humilde y respetuosa, pero envidiada por la gente que les rodeaba. La familia era muy unida ya que cada vez que se presentaba un problema sabían afrontarla con tranquilidad y unión.
Esta familia esta compuesta por los padres y los hijos. El padre trabajaba de contador,  mientras la esposa se quedaba en casa cuidando a los niños y ordenando la casa, un día el esposo llegó con una mala cara y triste a la vez, así que, empezó a discutir con la mujer; ella no entendía el carácter de su marido en ese momento sólo decía ¿por qué tanto alboroto?  ¿Es por dinero? Si bien es cierto el problema era el dinero, la familia ya lo había superado antes, entonces la mujer le volvió a preguntar  ¿que había pasado en el trabajo?  El hombre respondió diciendo que le habían quitado el puesto que ocupaba.
-          La esposa le dijo no es para tanto
Entonces el  marido se amargo más de lo que estaba y le dijo:
-          ¡cómo es que no entiendes! el dinero no va alcanzar, esta vez va ser peor y dices que no es para tanto eres una estúpida.
La mujer se sintió triste y se puso a llorar y entre lágrimas dijo:
-          Pero qué te pasa si esto nunca nos paso, nunca peleamos por el dinero además yo no soy culpable que te quitaran el puesto.
Bien dijo el marido como no es tu culpa de ahora en adelante en esta casa ya no será una mano que trabaje, sino que serán dos, pero quien se ocupara de los niños dijo la esposa , si les explicamos lo que pasa entenderán; en ese tiempo los niños eran menores el primero tenía 12 años y el segundo 5.
Los padres hablaron con los niños y tomaron bien lo que les dijo el padre; pero la madre inquieta volvió a preguntar quien cuidaría por las tardes a los niños y quien le haría el almuerzo cuando ellos volvieran del colegio. El esposo irritado por la insistencia de su mujer decidió traer a vivir a su madre con ellos. La mujer al oír esto se disgustó ya que su madre tenía un carácter malo y de ninguna manera era correcto traerla a vivir con ellos. Entonces el marido dijo:
-           Es mi madre además no tenemos el dinero suficiente para traer a  alguien que cuide de los niños.
La mujer se quedo sin palabras y no tuvo otra opción más que aceptar lo que dijo el marido. Pasaron dos semanas y la suegra llegó, pero no bien recibida por parte de la esposa, la  madre de su marido la miraba mal.
Bien la abuela se quedó con los nietos, la madre preocupada los dejó puesto que ella ya había conseguido un trabajo de enfermera técnica, ella trabajaba desde las 8 de la mañana hasta las 9 de la noche a diferencia de su esposo que llegaba una hora después, por supuesto,  que ahora el esposo trabajaba horas extras. Cuando llegaban del trabajo sólo encontraban a los niños durmiendo, ellos también cansados se echaban  en la cama y no despertaban hasta el día siguiente.
Un día los niños no tenían labores, los padres se fueron al trabajo y se quedaron con la abuela, los niños inocentes nunca habían ordenado algo, pues su mamá hacia todo mientras ellos estaban el colegio; la abuela le ordenó  que arreglaran juntos la casa que si hacían las cosas mal, les daría correazos, entonces los niños al escuchar esto nunca pensaron que su abuela sería así de mala con ellos, así que, no tuvieron otra opción mas que hacer caso. En el transcurso en que arreglaban el hijo menor accidentalmente tropezó con una piedra que estaba en el suelo del patio mientras llevaba los platos para lavar; la abuela escuchó esto y fue inmediatamente a ver que había sucedido y vio que los dos hermanos recogían los platos y al ver esto la abuela los agarró del brazo toscamente y les dio de correazos. Los niños con lagrimas esa noche esperaron a su madre, al llegar la madre encontró a sus niños llorando al verlos les preguntó qué había ocurrido, entonces ellos le contaron lo sucedido con la abuela; la mujer solo abrazó a sus hijos y se puso a llorar con ellos. Al llegar el esposo su mujer le conto lo que había sucedido amargo no le tomó importancia al llanto de sus hijos.
-          les dijo que esto les sirva como lección para que aprendan hacer algo bien y dejen de llorar o sino les aumentaré el dolor que tienen
La mujer se opuso, pero no sirvió de nada ya que el marido la ignoró y se fue a dormir.
Todos los días era lo mismo y siempre los niños esperaban a sus padres durmiendo; con el tiempo esto se hizo costumbre de pronto los niños empezaron a bajar su nivel en el colegio, pues se dedicaban a otras cosas y dejar las tarea de lado en  ocasiones no iban al colegio, pero igual ellos sabían que sus padres lo sabrían ni les interesaría.
Esto se hizo una forma de vivir para los niños y así crecieron hasta su adolescencia de una forma negativa sin el amor de sus padres, poco  a poco esta familia decaía, moría el amor que existió antes, la ternura que hubo alguna vez en la familia fue muriendo por la rutina…

SEUDONIMO: MALDRIL

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